40 horas a la semana, 160 al mes, casi 2000 al año. Pasamos mucho tiempo en el trabajo, así que no es de extrañar que queramos sentirnos cómodos en él. El interiorismo es importante, sobre todo cuando se trata del trabajo de oficina. ¿Qué soluciones debemos utilizar para maximizar nuestra eficacia en el trabajo?
Cada vez más empresas prestan atención al diseño interior de sus oficinas. Cómo nos sentimos en el lugar de trabajo se toma muy a menudo casi como una prioridad, de ahí el gran interés por soluciones que mejoren nuestra eficiencia.
Iluminación
Uno de los elementos clave en el lugar de trabajo es la iluminación. No debe ser demasiado oscura para que no se nos cansen los ojos y no sintamos sueño. Una luz demasiado intensa tampoco será adecuada: nuestros ojos se irritarán y, a largo plazo, esto puede provocar la aparición de un defecto visual. Es muy importante encontrar el «justo medio». Una solución interesante es utilizar fuentes de luz con ajuste de color. Esto se debe a que una luz diferente nos afectará mejor en invierno y en verano. Una solución como la lámpara Bolero resuelve este problema. A la hora de elegir la iluminación para la oficina, merece la pena apostar por el tipo LED. Es eficiente desde el punto de vista energético, lo que reducirá los gastos de la empresa. Además, no se calienta y no cansa en exceso la vista. Un ejemplo de este tipo de solución son los paneles Galaxy de GTV, que no perturbarán ningún espacio con su estética. Es importante recordar que, sea cual sea la solución por la que se decida, es importante garantizar el acceso a una fuente de luz natural, por lo que debe elegir ventanas grandes que permitan la entrada del sol.
Colores
Cuando te centres en la decoración, opta por colores claros y neutros. Los tonos oscuros pueden resultar irritantes para algunos, lo que repercutirá negativamente en el confort. Las paredes de colores pastel brillantes pueden romperse con abundantes plantas. El color verde es calmante y la compañía de flores y arbustos siempre ayuda a la creatividad. Sin embargo, es importante acordarse de cuidarlas con regularidad.
El descanso es esencial
Una tendencia que cada vez adoptan más empresas es la disposición de una sala chillout, donde podamos hacer una pausa para relajarnos de las penurias del trabajo diario. Cada vez son más las empresas que recurren a soluciones atípicas, como tumbonas, hamacas o elementos de diseño inusuales, como hierba que crece en la pared. En el caso de una sala de relajación, podemos permitirnos más en términos de iluminación. Sólo nos limita nuestra creatividad. Una idea interesante es utilizar varios puntos de luz LED en un espacio pequeño, creando el efecto de una habitación resplandeciente que invita a visitarla. Podemos ajustar el brillo de estos puntos para que no cansen la vista. Ofrecer entretenimiento también es habitual: las videoconsolas, las mesas de medio juego o las dianas de dardos ya no sorprenden.
El diablo está en los detalles
El accesorio suele ser el toque final. Marcos de fotos, bolas de equilibrio o pelotas antiestrés son objetos que podemos encontrar muy a menudo en los escritorios de los empleados. Una idea interesante y novedosa que se puede organizar en espacios abiertos es que el escritorio no pertenezca a un solo empleado: esa persona se sienta cada vez en un sitio distinto, lo que evita el efecto de fatiga e introduce un elemento de frescura en las tareas diarias y en el espacio.